El secreto para que las cosas sean hechas está en hacerlas.Dante Alighieri
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Hoy he vuelto a ver a la familia compartiendo, el corazón se alegra a la distancia porque luego de mucho tiempo, muchos meses unos seis se han reencontrado, han celebrado el día de amor y amistad (en Colombia se celebra en septiembre), mi suegra también su cumpleaños y estando a miles de kilómetros me causa la más sincera de las alegrías poder ver sus caras de felicidad, un regocijo alentador que no nos deja bajar la guardia; pero, que es tan importante de nuevo tener esos momentos valiosos para compartir con la familia, en medio de su unión..., a la final lo es todo.
Llevo unos días sin poder visitar cocinas y me disculpo por ello, estuve más bien desconectada; espero retomar el ritmo de nuevo con energía que el tiempo fresco con atardeceres maravillosos ha sido por estos días un regalo maravilloso que puedo disfrutar desde la ventana y el sol vuelve a iluminar nuestra habitación y ya viene un mejor tiempo, aunque cabe decir que este invierno no ha sido tan terrible como el año anterior que lo sentí congelador, quizás por la novedad de la ciudad.
El viernes pasado hice estos postres individuales que me flecharon (como siempre cuando voy revoloteando en la búsqueda de recetas para aprender de otros lugares). Esta vez, el destino es Florencia, me tope con una cantidad de recetas saladas (de todo mi gusto, unos bocadillos que son la locura de buenos y que se encuentran en las calles de los mercados de Florencia, el Lampredotto, un sándwich que es brutal y que espero conseguir ese cuarto estómago de vaca para un día probarlo).
Hoy no me extenderé mucho, solo lo suficiente para decir que en este domingo quería llegar con algo dulce y entrañable. Algo que remita a la infancia y recuerdos de personas que vivieron esta época de sus vidas en Florencia o lugares cercanos y que de alguna manera, mientras iba leyendo diferentes fuentes, todas coincidían con momentos especiales, recuerdos y viajes en el tiempo a esta época de sus vidas.
Este postre los lleva a sus más deliciosas reminiscencias y recuerdos de niñez con sus madres, abuelas, tías..., esta receta es una de esas que hace parte de los latidos de corazón de esos seres que guardan en su memoria el sello de esta receta y de tantas otras y que de alguna manera intentar revivir, conservar, y mantener para actuar como transmisores de esos sabores
Según leí en las panaderías de Florencia es tradicional (o era...), encontrar estos pudines de arroz en formato personal, los comen a mordiscos en el desayuno, una masa por fuera crocante y su interior es cremoso y estable con sabor a limón y vainilla. Se les puede encontrar en versión alta como los que traigo o también más planos (ambas válidas). En unas recetas en lugar de crema pastelera, lleva una mezcla de yema batida y claras montadas; pero me quedo con esta receta porque creo que es la más cremosa. (Hice fusión de algunas cosas de las otras que encontré).
Del arroz..., lo hice con arroz para risotto (es lo más italiano que tengo en casa, no dispongo de las variedades que tienen allí, y espero no me crucifiquen los italianos). Eso sí, he puesto el doble de leche de lo que decía la receta, ha pedido bastante y hasta que lo sentí cocido en su totalidad lo apagué. Me ha llevado unos 25 minutos de cocción, lleva aroma de vainilla y ralladura de limón, al final cuando ya esta cocido se le pone una nuez de mantequilla y tres cucharadas de azúcar y a enfriar. Por otro lado, se prepara la masa tipo Sablée (masa quebrada), que se deja entre papel film en la nevera; ésta lleva ralladura de naranja. En el mismo momento también he preparado la crema pastelera de limón siciliano (todo lo he realizado con esta variedad, que para el resto del mundo es limón y para mí es variedad "siciliano", porque vivo en Brasil). Esas tres preparaciones las hice la noche anterior para que enfríen bien. Al día siguiente se termina de preparar el relleno para luego formar las tartaletas que seguidamente van al horno por 25-30 minutos a 180°C.
La foto anterior es la consistencia obtenida del arroz combinado con la crema pastelera de limón, un color amarillo crema muy bonito, aromas de cielo y sabores de gloría. (Hasta aquí ya es un postre rico, lo que viene es ponerle la cereza a la receta). Se toman moldes que suelen ser ovalados y pueden ser altos, inicialmente intenté sacar discos de masa que extendí previamente; pero definitivamente este tipo de masa no se puede manejar así. Por lo que, recomiendo dividir en porciones de unos 50 gr. (eso depende del molde, pero en mi caso salieron 11 para esta cantidad, es una guía, por si les sirve). Para que queden bien rellenas (también importante es dejarlas con buen relleno, que al momento de cocinarse, se bajan un poco. Una vez horneadas y frías suelen espolvorear una lluvia de azúcar glas que no he puesto, creo que quedan perfectas de dulce y me gusta verlas así con su capa medio dorada de arroz de leche y ese relleno interno cremoso tan rico. Nota: Como siempre suelo hacer, reduje la cantidad de azúcar de la masa (por ello no se ve tan dorada la masa final, para mi gusto es perfecto con el resto de ingredientes).
_____________________________________________________________________________________________________Comparto esta entrada porque es tercer domingo de mes y participo con las chicas de Cocinas del Mundo que retoman el reto luego de las vacaciones. En esta ocasión Cocina y Aficiones, nos invita a la capital de la Toscana, Florencia (y yo la más feliz de realizar recetas italianas).
Tiempos}
Preparación Masa:20 minutos | Arroz de leche:25 minutos | Crema Pastelera:10 minutos |Formado y rellenado: 45 minutos | Horneado: 25-30 minutos. (horno a gas)
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Pudines de arroz de leche, delicias de Florencia / Budini di Riso
[11 moldes /porciones individuales / 1 molde de 22 cm diámetro y 7 de alto]
Ingredientes:
[MASA]
- 300 gr harina
- 100 gr mantequilla
- 1/2 cucharadita polvo de hornear
- ralladura de 1 naranja
- 1 pizca de sal
- 2 yemas de huevo
- 70 gr azúcar glas
[ARROZ DE LECHE]
- 300 ml leche + (400ml que puse durante el proceso)*
- 100 ml agua
- 1 cucharadita esencia de vainilla
- ralladura 1 limón siciliano
- 1/2 cucharadita sal
- 170 gr arroz italiano (utilicé de risotto)
- 45 gr azúcar (3 cucharadas)
- 25 gr mantequilla
[CREMA PASTELERA]
- 2 yemas de huevo
- 45 gr azúcar glas
- 230 ml leche
- ralladura 1 limón siciliano
- 12 gr fécula de maíz (maicena)
+ 50 gr azúcar glas (para el final)
*Inicialmente puse 400ml de leche, luego en el proceso tuve que adicionar más.
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«PREPARACIÓN»
Pudines cremosos de arroz de leche, delicias de Florencia / Budini di Riso
{la noche anterior}
1. Para el arroz de leche, poner en un cazo 300 ml de leche y el agua, adicionar la esencia de vainilla, la ralladura de limón y llevar a cocinar, una vez toma el hervor agregar el arroz y remover, es importante y removiendo constantemente para que no se pegue ni en la base. El arroz va a absorber la leche, en mi caso tuve que ir poniendo de a pocos más leche cuando comenzó a secar y aún tenía algún punto duro. (Puse en total 800 ml de leche). Una vez se ha cocido, apagar el fuego, adicionar el azúcar y la mantequilla y remover bien. Dejar enfriar bien y reservar en nevera hasta el día siguiente.
2. Para la masa base. Tamizar en un cuenco la harina y adicionar la mantequilla fría en láminas delgadas. Con las puntas de los dedos integrar todo como si estuviéramos desmoronando arena. Es importante no calentar la masa con las palmas de las manos para que al final la masa sea crujiente. Obtendremos una arena húmeda y fina. Adicionar la ralladura de naranja, la sal y el polvo de hornear, mezclar.
3. Aparte mezclar las yemas con el azúcar glas, combinar bien hasta tener una pasta suave. Poner encima de la harina y mezclar con los dedos hasta integrar bien. Sera una masa que se desmorona. Formar una bola, ponerla en papel film y llevar a refrigerar.
3. Para la crema pastelera: poner en un cuenco las yemas junto con el azúcar, la ralladura de limón, la leche y la maicena, batir bien y luego poner en un cazo a fuego medio. Batir constantemente para que no se formen grumos y quede una crema homogénea. Una vez comienza a tomar hervor, bajar al mínimo y seguir batiendo constantemente por unos 5 minutos más, siempre batiendo constantemente). Una vez cocinada, poner en una base plana y cubrir a piel (poner papel film directamente sobre la crema para evitar que se forme costra) y dejar enfriar bien reservar en nevera.
{Al día siguiente}
4. Sacar la masa del congelador y dejar templar un rato. Cortar trozos de unos 50 gr y con ayuda de los pulgares cubrir el molde. (intenté formar discos pero, creo que es más sencillo de esta manera). Con esta cantidad han salido 11 moldes. Cortar la masa sobrante de los moldes con un cuchillo.
5. Calentar el horno a 180°C
6. Terminar de hacer el relleno: Una vez tenemos el arroz bien frio al igual que la crema pastelera. Ponemos en un cuenco el arroz con los 50 gr. de azúcar que teníamos reservados y los mezclamos. Luego adicionar la crema pastelera y mezclar con una espátula de goma, hasta que todo este bien combinado.
7. Rellenar los moldes con ayuda de una cuchara, se han ido unas dos cucharadas soperas grandes para cada molde. [Rellenar cada molde con buena cantidad de arroz]
8. Llevar al horno a 175°C por 25-30 minutos, hasta que estén los bordes de masa ligeramente dorados.
9. Dejar enfriar y si gustan una vez fríos, espolvorear azúcar glas a gusto (de esta manera es que los sirven tradicionalmente en Florencia). Yo no lo hice, me parece que así, quedan perfectos de dulce.
:::::::: PASO A PASO FOTOGRÁFICO ::::::::
Pudines cremosos de arroz de leche, delicias de Florencia / Budini di Riso
{la noche anterior}
1. Para el arroz de leche, poner en un cazo 300 ml de leche y el agua, adicionar la esencia de vainilla, la ralladura de limón y llevar a cocinar, una vez toma el hervor agregar el arroz y remover, es importante y removiendo constantemente para que no se pegue ni en la base. El arroz va a absorber la leche, en mi caso tuve que ir poniendo de a pocos más leche cuando comenzó a secar y aún tenía algún punto duro. (Puse en total 800 ml de leche). Una vez se ha cocido, apagar el fuego, adicionar el azúcar y la mantequilla y remover bien. Dejar enfriar bien y reservar en nevera hasta el día siguiente.
2. Para la masa base. Tamizar en un cuenco la harina y adicionar la mantequilla fría en láminas delgadas. Con las puntas de los dedos integrar todo como si estuviéramos desmoronando arena. Es importante no calentar la masa con las palmas de las manos para que al final la masa sea crujiente. Obtendremos una arena húmeda y fina. Adicionar la ralladura de naranja, la sal y el polvo de hornear, mezclar.
3. Aparte mezclar las yemas con el azúcar glas, combinar bien hasta tener una pasta suave. Poner encima de la harina y mezclar con los dedos hasta integrar bien. Sera una masa que se desmorona. Formar una bola, ponerla en papel film y llevar a refrigerar.
3. Para la crema pastelera: poner en un cuenco las yemas junto con el azúcar, la ralladura de limón, la leche y la maicena, batir bien y luego poner en un cazo a fuego medio. Batir constantemente para que no se formen grumos y quede una crema homogénea. Una vez comienza a tomar hervor, bajar al mínimo y seguir batiendo constantemente por unos 5 minutos más, siempre batiendo constantemente). Una vez cocinada, poner en una base plana y cubrir a piel (poner papel film directamente sobre la crema para evitar que se forme costra) y dejar enfriar bien reservar en nevera.
{Al día siguiente}
4. Sacar la masa del congelador y dejar templar un rato. Cortar trozos de unos 50 gr y con ayuda de los pulgares cubrir el molde. (intenté formar discos pero, creo que es más sencillo de esta manera). Con esta cantidad han salido 11 moldes. Cortar la masa sobrante de los moldes con un cuchillo.
5. Calentar el horno a 180°C
6. Terminar de hacer el relleno: Una vez tenemos el arroz bien frio al igual que la crema pastelera. Ponemos en un cuenco el arroz con los 50 gr. de azúcar que teníamos reservados y los mezclamos. Luego adicionar la crema pastelera y mezclar con una espátula de goma, hasta que todo este bien combinado.
7. Rellenar los moldes con ayuda de una cuchara, se han ido unas dos cucharadas soperas grandes para cada molde.
...Rellenar cada molde con buena cantidad de arroz
8. Llevar al horno a 175°C por 25-30 minutos, hasta que estén los bordes de masa ligeramente dorados.
Dejar enfriar y si gustan una vez fríos, espolvorear azúcar glas a gusto (de esta manera es que los sirven tradicionalmente en Florencia). Yo no lo hice, me parece que así, quedan perfectos de dulce.
Me encantan tibios con esa consistencia crocante de la base de galleta y con el delicioso y cremoso relleno es tan suave y tierno que se derrite en la boca.
Se pueden congelar y luego será cuestión de ponerlos a descongelar o darles un golpe de calor. (Aún no lo probé, ya lo actualizaré, pero leí que así lo hacen varias chicas, y es ideal para cuando solo somos dos en casa).
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Reto Cocinas del Mundo
Septiembre 19/ 2020
Destino: Florencia, Italia
Septiembre 19/ 2020
Destino: Florencia, Italia
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Muchas gracias por pasar por éste rincón,
lleno de poesía de sabores, de sentimiento,
de pensamientos; que para muchos
son recetas conocidas,
para otros descubrimientos completos,
y para otros tantos, recuerdos de la infancia ó
remembranzas de algún instante especial
y para mí son todas estas y muchas más..,
entre nuevos retos que día a día me llevan a explorar
dotes que desconocía y que enriquecen mi alma, cuerpo y ser.
Agradezco cada comentario y estaré atenta a las dudas que se presenten ^_^
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Me encuentran en:
#poesiaculinaria · @poesiaculinaria
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Natalia, gracias por tu participación. Yo soy fan del arroz con leche y seguro que estos pudines de bocado son perfectos para rematar una comida familiar. Te entiendo perfectamente en los deseos de ver a la familia. Para mi los meses de confinamiento que hemos tenido por el covid-19 han sido de lo más doloroso por no poder ver a mis hijos, a mis nietos y a mis hermanas.
ResponderBorrarUn abrazo,
Elena
Gracias a ustedes chicas, la verdad es que están buenísimos, un antojo total que por fin he tachado y que me queda en mi mente como uno de esos postres entrañables por repetir muchas veces más. Este ha sido un año locooooo, tener mucha paciencia
Borrarbesitos!!!
Natalia, tu como siempre bordando los retos!! que preciosidad de postres, me parecen superoriginales, callejeros, sencillos, bonitos y deliciosos, una estupenda elección!
ResponderBorrarun besazo!
Unos postres requetebuenos!!! ;)
Borrarque bueno que te gusten Hirma, tienen esa combinación de texturas de la galleta con la crema de arroz y aroma de limón que va tan bien.
besos guapa!
Natalia, me alegra que hayas disfrutado de este día de la amistad, aunque sea virtualmente, con tu familia. Solo los que tenemos el corazón partido entre varios lugares, comprendemos que difícil se hace la distancia y el estar separados, pero afortunadamente ahora gracias a las videoconferencias se lleva de otra manera, es como estar juntos o tener a los que queremos un poquito más cerca.
ResponderBorrarCon respecto a tus dulces, decir que me ha gustado muchísimo, el arroz con leche me fascina y lo hago con frecuencia durante todo el año. Ni que decir tiene que el tuyo con vainilla y esa crema, me ha vuelto loquita, ¡qué maravilla!
Por cierto, estuve hace años en Florencia, y no recuerdo haber visto estos Pastelitos en ningún sitio, quizás sea que yo siendo poco dulcera, suelo tomar solo café cuando voy a alguna cafetería, por aquel entonces no tenía cámara réflex digital, solo una convencional de carrete 🎞 pero tiraba fotos a diestra y siniestra, igual que ahora, Jajajaja... así que miraré entre mis álbumes a ver qué encuentro para refrescar mi memoria.
Besos y feliz noche
Es verdad Concha, esa distancia que nos hace valorar cada segundo cuando tenemos a la familia cerquita y que no nos cansamos de abrazarnos, de decirnos te quiero una y mil veces más. Soy la más fastidiosa con ellos, hasta el punto de las melcochas muchas veces, pero es que hay que cargarse de ellos cada vez que los tienes cerca. Tan cierto que se agradece que en estos tiempos a la hora que queramos con oprimir un ícono tenemos acceso a video llamadas, es cierto, y que bueno que podemos disfrutar de esos espacios.
BorrarEs un arroz bien diferente al que hace mi madre y en consecuencia Mr.G que aprendio a realizar la receta que ella hace; pero, me encantó también con aroma de limón y esta base de galleta una cosa brutal. El arroz de leche me encanta en días de lluvia, no sé porqué pero me encanta. Ahora estas versiones creo que van perfectas en días más de sol, bueno como sean nos han enamorado.
Como te decía por Ig, quizás ya no se vean tan seguido, quizás sean meros recuerdos, o quien sabe..., solo sé que las remembranzas que encontré en diferentes blogs me hicieron revivir esos recuerdos ajenos y sentirme un poquito allí, en un rinconcito de esa Florencia de cada recuerdo.
besitos!!!!
Hola Natalia, siempre que vengo a tu cocina aprendo recetas nuevas, que delicia! estos pastelitos tienen un relleno de lo más irresistible, me encantan. Ya te digo que me desayunaba ahora un par de ellos... :) feliz día !
ResponderBorrarHola Silvia!!!, que bueno que te gusten ;)
Borraren casa nos han dejado alucinando y eso sí, creo que con el paso de los días se ponen más ricos.
besitos!!!!!!!
Se me hace la boca agua solo con verlos, ¡¡quiero probarlos!!
ResponderBorrarUn abrazo
Concha
Y a mí!!!!, ya se acabaron y quiero más!!!,
Borrarque bueno que te gusten Concha,
un abrazo! ;)
que bien que hayas podido ver a la familia feliz aunque sea en la distancia, en los tiempos que vivimos eso es de agradecer, esos momentos son los que siempre asociamos a estos dulces típicos, algo en común de cualquier rinconcito del mundo, una reunion familiar después de mucho tiempo siempre va a estar acompañada de una copita y un dulce del recetario de la abuela 😊 Encantada de pasar por tu cocina disfruta de ese fresquito antes de que llegue tu verano, aquí ya disfrutando del otoño y sus tardes de lluvia y mantita 😘
ResponderBorrarHola Bea, sí es de agradecer verlos y que estén bien. Dulces que endulzan corazones, es cierto esas recetas de tradición de abuelas que nos marcan nuestras tradiciones, con delicias tan parecidas, con variaciones y firmas que hacen de cada postre una receta especial. Por acá afortunadamente el verano demora en llegar, seguiremos disfrutando de clima fresco, en modo otoñal en medio de una primavera que llega para dar colores. Yo soy una loca otoñal, por lo pronto a disfrutar de recetas, aprender y compartir. Me alegra verte por acá Bea ;)
Borrarbesitos
Mi querida Nati, me alegro mucho de que aún en la distancia hayas podido ser testigo de ese reencuentro. Esta pandemia nos tiene a todos volteados y no somos conscientes de que no podemos hacer vida normal, que hay que seguir, pero con muchas medidas para salir cuanto antes de esta locura.
ResponderBorrarNo tienes que disculparte por tu ausencia. A veces estamos muy en la red, otras necesitamos tiempo para otras cosas. Una visita, sea cuando sea, siempre es bien recibida
Tu postre de hoy es una maravilla. Rico, bonito y una forma estupenda de viajar sin riesgos
¡Besos mil!
Es cierto Cuca, toca seguir, asimilar lo que es esta cosa, salir y tener precaución, disfrutar de la tecnología y sus posibilidades estando a miles de kilómetros de distancia.
BorrarQue bueno que te guste, en casa nos ha dejado una huella de sabores bien especial, como para repetir; pero siendo sincera, en medio de una repostera, panadera, cocinera..., que siempre esta buscando recetas nuevas, ya veremos cuando repito. El abanico de postres deliciosos cada vez se amplia más y más.
besitossss
Sí Nati, recetas tradicionales que no deben perderse, tan deliciosas y cargadas de tradición. Las fotos son tan bonitas que poder verlas ya es disfrutar. Un beso!!
ResponderBorrarRecetas que tienen historias, recuerdos, huellas de manos de abuelas, madres, tías, abuelos, tíos, padres..., recetas mágicas que siempre disfruto conocer.
Borrargracias Elisa, besitos!!!
querida Nati. Viajar a Florencia sería un placer, pero no es posible y me conformo con disfrutar de tus pudines. Como siempre, las recetas tradicionales me fascinan, más cuando las haces tú. Me gustaría comerme uno como mínimo.
ResponderBorrarLos reenuentros, incluso sin confinamiento, yo los evito al máximo. Puedo entender tu situación y deseo con fuerza, que todo esto mejore.
Un beso enorme. Aquí ya es muy tarde.
Viajes virtuales que disfruto mucho Marisa, muchas gracias por tus palabras, que bueno que te gusten. Entiendo aquello de los reencuentros, espero que todo vaya poco a poco caminando, yo disfrutaré siempre de tu cocina, de tu amistad, de tus enseñanzas.
ResponderBorrarbesos grandotes!!!!!!!!
Hola Natalia. Estoy mucho mejor gracias😉intentando volver poquito a poco a la normalidad💪 De un clásico como es el arroz con leche, has hecho una deliciosa y tentadora receta para tener en cuenta👌 y de paso darnos un paseo virtual. besinos
ResponderBorrarAnotada para probarla ❤️ soy fan del arroz con leche
ResponderBorrarHola Natalia! Qué rico el viaje y la comida, con cada receta nos transportas a lugares y sabores maravillosos, yo creo que no aguantaría la espera y me comería la crema con arroz a cucharadas, me parece una combinación maravillosa.
ResponderBorrarQué alegría saber que tu familia está bien y puedan reunirse, espero que pronto puedas estar con ellos también.
Un beso, cuídate mucho!
Me encanta la idea de meter el arroz con leche en masa, me estoy relamiendo mmmmmm
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