9.2.21

❦ Pastel Nube de chocolate y naranja... [Sin harinas] ❦

[4] ingredientes para una Nube con sabor a chocolate, bocados que roban suspiros, no te quedes con las ganas de ver esto... 

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{Desde la distancia celebro tu cumpleaños padre}.  Ayer en la tarde luego de una larga revisión de recetas finalmente escogí un bizcocho que va de maravilla para este día y simbólicamente también es mi manera de celebrar un año más de vida de ti G. La inspiración de la obra que llega con esta delicia esponjosa de chocolate resulta más que especial. Miro hacía el norte, allí cerca de casa, como el hombre que representa la pintura que hoy nos atañe, una obra bella que lo pone a uno en ese gran pico a divisar aquel paisaje tranquilo, majestuoso y lleno de nubes... 
Siendo día 9, la cita es con el reto CocinArte. Donde María desde su delicioso espacio In my little Kitchen, nos invita cada mes a descubrir un cuadro o espacio arquitectónico, escultura analizando algún pintor, estilo, época... una ventana que nos lleva a crear deliciosas recetas.    
El día de hoy tenemos a Caspar David Friedrich, un pintor nacido en 1.774 en la Pomerania suiza, actual Alemania. Antes de cumplir sus 20 años, su madre, hermana y hermano habían muerto, por lo que él siempre tuvo una personalidad más bien melancólica e irónica. Hizo parte del movimiento del romanticismo alemán, movimiento que proclamaba la supremacía de la libertad, del sentimiento y la subjetividad, frente a la razón que se leía para los románticos como algo estéril. La mejor manera de mostrar estos sentimientos era mediante la admiración y contemplación de la naturaleza. Cuando la obra mostraba las fuerzas de la naturaleza, vientos, tormentas, fuego, niebla, lluvias, nieve, montañas, mares..., ese sentimiento lo denominaban "lo sublime", y era a la vez una metáfora de lo que el artista sentía en sus entrañas, una metáfora del interior y exterior del artista.  Pues bien, esta obra representa precisamente esa metáfora.  
Caminante Sobre el Mar de Nubes. /Der Wanderer über dem Nebelmeer/ 1.818.


La obra que hoy inspira la receta es de las que personalmente, más me han cautivado, leyendo y leyendo acerca de esta pieza es un clásico que al día de hoy siempre esta vigente y que se ha prestado para muchos análisis e intervenciones. Se trata de El Caminante Sobre el Mar de Nubes. /Der Wanderer über dem Nebelmeer/ 1.818. Perteneciente a ese siglo de las luces con el movimiento de la Ilustración. De la pintura y el artista primero decir que en sus obras se lee ese simbolismo que retrata en este caso al propio pintor. Aquel hombre contemplando un paisaje blanco, desde un pico de rocas, a lo lejos se ven algunas montañas en medio de muchas nubes, también un monte y arboles que se pierden entre la niebla. Según leí acá; el punto medio de la pintura descansa en el pecho del hombre. "El corazón es el centro del universo", según Joseph Koerner. Este paisaje hace parte de las Montañas de Arenisa del Elba, un conjunto de rocas individuales y formas naturales que el autor previamente retrato desde aquel lugar (cuando se refugiaba de las guerras napoleónicas), para luego desde su estudio improvisar y componer este paisaje basado en aquellas montañas. Muchos han catalogado la obra como el "Wandered" de Friedrich, al pintor lo comparan con Joseph Mallord William Turner y John Constable.  Muchas de sus obras se caracterizan por la idea de plasmar personajes solos, aislados y de espaldas; figuras que contemplan los paisajes inconmensurables, recordando la pequeñez humana frente a la asombrosa cosmología de la naturaleza. 


Pues bien, la receta hoy va inspirada en esa sensación de pequeñez, de volar por las nubes de aquel paisaje, ver a lo lejos tantos otros lugares que el pintor nos muestra, ser cada uno el propio observador y desencadenar un sinnúmero de sentimientos. 

Una receta muy fácil, solo tiene 4 ingredientes principales: chocolate, mantequilla, huevos, azúcar. La metáfora va con esa sensación de las nubes, de lo sutil, con una montaña de chantilly que se catapulta sobre una roca (por su color solamente), que en cambio resulta ser una nube esponjosa de textura aireada por cuenta del juego de los huevos batidos, por un lado yemas separadas con una parte de azúcar, por otro lado merengue y la suma la lleva el chocolate 70% de cacao derretido al baño María, combinado con una parte de mantequilla y ralladura de piel de naranja para aromatizar. También encontramos unas rocas sutiles de chocolate que con lluvia de azúcar glas y cacao en polvo recuerdan esa sensación de sutileza y delicado sabor que deja en boca cada porción de esta Nube esponjosa (Una redundancia que amé)... . Por cierto es tan sencillo de preparar que sin ser una #chocolover, esta receta se volverá parte de muchas tardes más de lluvia quizás con aroma en casa de mucho chocolate delicioso, es sencilla y deliciosa insisto porque así me lo ha parecido y el sentimiento que me deja es de placer y felicidad, gracias chocolate por tus bondades intrínsecas. 

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Tiempos}
Preparación: 40 minutos | Horneado: 35-40 minutos*Horno a gas
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Ingredientes:
Pastel Nube de chocolate y naranja... [Sin harinas]
Rinde 8 porciones | Molde desmontable 20 - 22 cm 
[PARA EL PASTEL]
- 225 gr chocolate negro 70% cacao
- 60 gr mantequilla sin sal (temperatura ambiente)
- 6 huevos (300gr){2 huevos enteros y 4 separados}
- 140gr azúcar
- ralladura de piel de naranja
[PARA LA CREMA]
- 130 gr nata 35-45% grasa
- 1/2 cucharadita azúcar glas*
- 1/3 cucharadita esencia de vainilla
+ azúcar glas
+ cacao en polvo
*En mi caso me gusta la crema chantilly bajita de dulce, para que contraste perfecto con el(no bizcocho).
Nota: Poner un disco de papel de horno en la base del molde y una tira de papel en las paredes, NO cubrir de mantequilla, solo utilizar el papel. 
**Receta adaptada de acá
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«PREPARACIÓN»
Pastel Nube de chocolate y naranja... [Sin harinas]
1. Calentar el horno a 200°C. Alistar el molde desmontable cortando un círculo para la base y sacar una tira doble para las paredes del molde.  
2. Derretir el chocolate al baño María, una vez derretido, agregar la mantequilla y disolver bien,  retirar del fuego y dejar templar.
3. Batir las claras, cuando estén espumosas adicionar la mitad del azúcar y batir hasta tener un merengue firme.
4. Batir las yemas con el azúcar hasta tener una crema de color amarillo claro.
5. Adicionar la ralladura de piel de naranja al chocolate y mezclar bien. Verter de a poco el chocolate en la crema de yemas hasta combinar todo mezclar en movimientos envolventes.
6. Agregar por partes las claras montadas e integrar en movimientos envolventes para conservar la mayor cantidad de aire posible.
7. Verter la mezcla en el molde y llevar al horno por 35-40 minutos a 170°C. (Cuando la mezcla haya crecido y se mueva solo ligeramente en el centro, retirar del horno, dejar templar y desmontar del anillo de metal, dejar enfriar bien. 
8. Una vez frío, quitar con cuidado el papel de los bordes.  Batir la nata con el azúcar glas y la esencia de vainilla, hasta tener una nata montada. Poner en una manga pastelera y decorar al gusto, espolvorear azúcar glas, cacao en polvo y poner un poco de virutas de chocolate negro. ¡A disfrutar!... Nota: Importante no pasarse de cocción para que quede esponjoso y cremoso. 


:::::[PASO A PASO FOTOGRÁFICO]:::::

Pastel Nube de chocolate y naranja... [Sin harinas]

1. Calentar el horno a 200°C. Alistar el molde desmontable cortando un círculo para la base y sacar una tira doble para las paredes del molde.  
2. Derretir el chocolate al baño María, una vez derretido, agregar la mantequilla y disolver bien,  retirar del fuego y dejar templar.

 

3. Batir las claras, cuando estén espumosas adicionar la mitad del azúcar y batir hasta tener un merengue firme.

 

4. Batir las yemas con el azúcar hasta tener una crema de color amarillo claro.

 

5. Adicionar la ralladura de piel de naranja al chocolate y mezclar bien. Verter de a poco el chocolate en la crema de yemas hasta combinar todo mezclar en movimientos envolventes).

 

6. Agregar por partes las claras montadas e integrar en movimientos envolventes para conservar la mayor cantidad de aire posible.

 

7. Verter la mezcla en el molde y llevar al horno por 35-40 minutos a 170°C. (Cuando la mezcla haya crecido y se mueva solo ligeramente en el centro, retirar del horno, dejar templar y desmontar del anillo de metal, dejar enfriar bien.

8. Una vez frío, quitar con cuidado el papel de los bordes.  Batir la nata con el azúcar glas y la esencia de vainilla, hasta tener una nata montada. Poner en una manga pastelera y decorar al gusto, espolvorear azúcar glas, cacao en polvo y poner un poco de virutas de chocolate negro. ¡A disfrutar!.. 
 Nota: Importante no pasarse de cocción para que quede esponjoso y cremoso.  



*** Se conserva bien entre un recipiente hermético en la nevera por unos 4-5 días.  (En caso de querer rendirlo muchooooooo, porque la verdad es que es adictivo y delicioso. 

{Ideas para San Valentín (quienes lo celebran), para un cumpleaños, o para una tarde especial...}

No tengo más palabras, tan solo les regalo un poema que me parece precioso y también me lleva un poco a esta obra...

 

NUBES

No habrá una sola cosa que no sea
una nube. Lo son las catedrales
de vasta piedra y bíblicos cristales
que el tiempo allanará. Lo es la Odisea,
que cambia como el mar. Algo hay distinto
cada vez que la abrimos. El reflejo
de tu cara ya es otro en el espejo
y el día es un dudoso laberinto.
Somos los que se van. La numerosa
nube que se deshace en el poniente
es nuestra imagen. Incesantemente
la rosa se convierte en otra rosa.
Eres nube, eres mar, eres olvido.
Eres también aquello que has perdido.



Por el aire andan plácidas montañas
o cordilleras trágicas de sombra
que oscurecen el día. Se las nombra
nubes. Las formas suelen ser extrañas.
Shakespeare observó una. Parecía
un dragón. Esa nube de una tarde
en su palabra resplandece y arde
y la seguimos viendo todavía.
¿Qué son las nubes? ¿Una arquitectura
del azar? Quizá Dios las necesita
para la ejecución de Su infinita
obra y son hilos de la trama oscura.
Quizá la nube sea no menos vana
que el hombre que la mira en la mañana.


"Los conjurados" (1985) . 
Jorge Luis Borges | "Poesia Completa", págs. 607 e 608 | Debolsillo, 3ª. edição, 2016 




Fuente del poema acá 


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Fuente de análisis  acá 



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Muchas gracias por pasar por éste rincón,
lleno de poesía de sabores, de sentimiento,
de pensamientos; que para muchos
son recetas conocidas,
para otros descubrimientos completos,
y para otros tantos, recuerdos de la infancia o
remembranzas de algún instante especial
y para mí son todas estas y muchas más...,
entre nuevos retos que día a día me llevan a explorar
dotes que desconocía y que enriquecen mi alma, cuerpo y ser. 


Agradezco cada comentario y estaré atenta a las dudas que se presenten


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13 comentarios:

  1. Ummm menuda delicia ❤️❤️

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  2. Hola Nati, este pastel es una verdadera nube de sabor, se ve riquísimo, cuanto diera por tomarlo de la pantalla y probar un buen trozo con un café jejejeje. De verdad que admiro sus creaciones, ya logro identificarlas en instagram, apenas veo las fotos, ya se que son tuyas sin ver quien publicó jejejeje .... ya tus creaciones tienen tu ojo clínico, y tu amor en la elaboración.

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  3. Nati siempre un placer leer tus relatos :-))
    Un dulce bien bueno como siempre.
    1 saludito

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  4. ¡¡Hola Natalia!! Esta vez no conocía al pintor, siempre es agradable conocer nuevos artistas, aunque ya tenga algún siglo que otro y yo aún sin descubrir. El cuadro que nos muestra, ya demuestra esa melancolía que dices que solía tener el artista. Aunque, muchas veces, el artista es melancólico por naturaleza, independientemente de que fuera algo muy común en la época del romanticismo. Pues bien, este cuadro lo refleja, esa soledad ante la inmensidad.
    Bueno, después de la reflexión, ja, ja, ahora admiro tu pastel de nube, que ya sólo el título incita a amarlo, esa textura esponjosa y volátil, ¡qué rico! Y por si no fuera rico ya de por sí, me lo mejoras con el chocolate y ese toque de naranja. ¡¡Delicioso!! Besitos.

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  5. NAti una receta espectacular y una bonita forma de celebrar aún en la distancia. Esta pandemia nos ha cambiado la vida y ojalá fuéramos capaces de salir pronto de ella.

    Me gusta tu receta, rica en chocolate, pobre en azúcares y grasas, muy de mi estilo. Me la guardo, que todo lo que hago de tu cocina es un exitazo asegurado

    ¡Besos mil!

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  6. Ya te digo que si yo pudiera dar un solo bocado a ese pastel, mi sensación sería sin duda ..... puro placer.

    Preciosas fotos y un pastel estupendo.
    BBs

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  7. Me imagino esa textura casi como una mousse y me relamo con la suavidad. Y el toque de naranja divino.

    Bss

    Elena

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  8. Guau, tu nube de chocolate me la puedo imaginar al probarla, pero que deliciosa!
    Besos

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  9. Me ha asombrado el parecido que hay entre tu creación gastronómica con la pictórica. Mismos colores y misma luz superior, creo que has captado la esencia de ambos estupendamente. Yo no puedo hablar de la pintura, no conozco al autor, ni tengo criterio para hacerlo, pero si de tu pastel que me parece increíble. Sin nada de harina debe quedar como una nube de caramelo suave que se deshace en la boca. A mi tampoco me gustan los pasteles excesivos en azúcar, por eso de éste me comería un buen cacho, seguro que no me pesa. Es una explosión de sabor suave chocolateado que debe dejar un regusto en el paladar para no olvidar.
    Espero que os encontréis todos bien.
    Bss

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  10. Olá Natália, adorei a tua sugestão, adoro chocolate, ficou lindo, beijinhos.

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  11. Hola Natalia, espectacular el pastel nube, con esta textura. Se ve tan rico, y con chocolate que lo hace de lo más irresistible. Un placer siempre venir a tu blog y leerte. Me ha encantado el post.
    Besos :)

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  12. Que buena reseña...
    Definitivamente se le da honor al nombre del blog.
    Gracias


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  13. Hola Nati!!
    En las nubes me he quedado yo viendo esta maravilla de dulce.
    Se ve que es para disfrutar en cada bocado.

    Besos

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Muchas gracias por visitar este rincón y dedicar un momento de tu día para pasarte por acá, lo aprecio mucho. Siempre bienvenido a este taller mágico de Poesía Culinaria. ◠‿◠