14.4.21

Ciaramicola / Un regalo de las novias a sus novios en día de Pascua . {Perugia.Italia} ·•·[1+/-100 desperdicio 0]

 


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Esco dal mio lavoro tutto pieno
Esco dal mio lavoro tutto pieno

di aride parole. Ma al cancello
hanno posto gli dèi per la mia gioia
un fanciullo che giuoca con la noia.
Sandro Penna
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 20:00 . {Un bizcocho con sabor a ponqué de fiesta especial, quizá de alguna piñata de infancia..., eso es lo que despierta en mis sentidos esta receta}

 

Llego hablando de ponqué, como le decimos a los bizcochos especiales en mi tierra y creo que también en Venezuela, ya me dirán mis amigas, esta receta en especial me ha regresado en el tiempo en un bocado. 
Hace parte de la tradición de Perugia en la región de Romaña ver esta Ciaramicola que consiste en un bizcocho que por cierto me pareció en un inicio de una textura más bien densa, claramente no es un bizcocho esponjoso, pero mi sorpresa fue que al probarlo..., es muyyy bueno.

 

Me llevó al pasado, a las piñatas de cumpleaños de cuando era niña, una textura deliciosa, no sé como explicarla bien, es densa pero el sabor es maravilloso y claro ir tasando un poquito de bizcocho-un poquito de merengue, es una cosa loca de rica. El merengue con estos confetis de colores que caracterizan la decoración de este manjar me trasladan sin chistar a otros lugares...
Y también me llevó al pasado, cuando después de misa, mi tía en compañía de mi abuela y también de mi madre, más el resto de primas, tenían como ritual pasar a comprar para las pequeñas de entonces merengues lindos de colores que puestos en la vitrina, parecían un arcoíris de tonos pasteles azul, blanco, rosado, verde..., y llevaban estas chispitas de colores que me atraían mucho. Cada una elegía uno y seguía el camino a casa con su dulce bocado en boca, era un gran regalo, siempre que querían desviarse por otra cuadra, por aquí les recordábamos que había que pasar por la panadería y los merengues de colores.  
Esta Semana Santa fue más bien tranquila, en medio de encierro llevado con calma y esperanza, porque no se puede perder, ni desesperar, a pesar de la locura en la que andamos por estas tierras de Brasil. Este bizcocho hizo parte del desayuno de domingo de pascua, ...esa semana coincidieron varios retos y hasta ahora con calma lo comparto, claro que, se puede hacer cualquier época del año, la verdad lo veo en un cumpleaños de alguna enana de la familia, eso sí..., para la cantidad de azúcar que es más bien poca en cuanto al bizcocho, ...(entre las proporciones de las recetas que suelo realizar, casi todo lo que se refiere a dulce lo intento bajar al máximo, <no hice lo mismo con el merengue>,  por lo que, creo que para la próxima vez con la mitad de la porción tendremos, porque no fuimos capaces de zamparnos toda esa nube (otros tiempos los de ahora, que el cuerpo no se acostumbra a estas dosis), eso sí, rico estaba y más.  
Me gusta realizar siempre alguna delicia de repostería de Pascua y ya que en mi tierra no tenemos costumbre de dulces para esas fechas, por lo menos no en casa; siempre que puedo me voy a viajar por el mundo y las recetas de estas fechas. Suelo caer una y mil veces en Italia, yo no sé pero ese país tiene un imán para mis sentidos..., será que en otra vida viví por allí.  La forma de la Ciaramicola es en formato de rosca,  se dice que este bizcocho se lo regalaban las novias a sus pretendientes en Pascua, no sé muy bien la historia. De la receta, es una adaptación que hice.  Creo que por las fotos de la original debería quedar más esponjoso, pero no coincide alguna cosa con lo que hice, y eso que reduje la cantidad de harina, de todas formas me lleve una sorpresa grata que me hizo viajar a otros tiempos de infancia.
Tradicionalmente esta receta lleva licor Alchermes, por lo que suele quedar un poco rosado en su interior, claro que creo que le ponen también colorante a muchas de las recetas que vi, porque varias queda bien rosadito el interior. Va coronado con una capa de merengue y chispas de colores que se pone luego de haber horneado el bizcocho va unos minutos al horno y no debe dorarse, la idea es que se cree esa capa crujiente, por lo tanto se debe dejar secar entre el horno. Se dice que esta receta representa los cinco distritos de la ciudad de Perugia, los colores de la Ciaramicola representan los colores de dichos distritos, así como su escudo de armas. 

 

Para este caso, no tenía dicho licor, así que es una adaptación ya que utilicé un licor de fresas que hice desde agosto pasado y ahora que fui a ver, me parece un experimento de lujo, fue muy improvisado todo, pero allí tengo un frasco y es de esos experimentos donde el azúcar hace magia. Este año quizás lo haga en mi primavera, con estudio y en mayor cantidad. (En el proceso pongo una foto del frasco y su aspecto, ha estado allí, por 7 meses y me ha sorprendido) .

Así que aprovechando esos experimentos que hacemos muchas veces, envío directamente esta receta al Proyecto 1+ / - 100, desperdicio 0organizado por Marisa con su blog Thermofan. En el compilado de abril pueden participar y anexar ideas, recetas y proyectos hechos a mano... para aprovechar lo que tenemos en casa, les dejo los recopilatorios mensuales que lleva este proyecto.   

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Tiempos}
Preparación bizcocho: 15 min |  Horneado: 35 min + reposo| Merengue: 10 min  Horno: 7 min
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Ingredientes:
Ciaramicola / Un regalo de las novias a sus novios en día de Pascua . {Perugia.Italia}
[ 10 porciones ]
[ BIZCOCHO]
- 2 huevos (100gr)
- 90 gr azúcar
- 65 gr mantequilla (ghee en mi caso)
- 70 ml alchermes (licor de fresa casero en mi caso)
- 90 gr yogur natural (adición personal*)
- 250 gr harina de trigo
- 9 gr polvo de hornear (1 cucharadita bien llena)
- ralladura de 1 limón siciliano
- 3 gr sal
[ MERENGUE]
+ 100 gr azúcar
+ 2 claras de huevo (temperatura ambiente) 60 gr 
+ 1 cucharadita pequeña de fécula de maíz (maicena)
+ 1 cucharadita esencia de vainilla
+ chispitas de colores 
NOTA:En caso de querer colorear el interior del bizcocho, poner un poco de colorante rojo. 
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«PREPARACIÓN»
Ciaramicola / Un regalo de las novias a sus novios en día de Pascua
[Lo preparé la noche anterior]
1. Mezclar los huevos junto al azúcar hasta que se forme una crema de color amarillo claro, luego agregar mantequilla (en mi caso ghee), ralladura de limón y batir de nuevo. Adicionar el licor (y en caso de poner colorante, hacerlo en este momento), agregar el yogur natural. Tamizar la harina junto al polvo de hornear y la sal, mezclar con espátula en movimientos envolventes. (Me ha quedado una textura más bien gruesa...)
2.  Alistar el molde con mantequilla y harina, poner la mezcla adentro y emparejar para que todo esté bien nivelado. Llevar al horno precalentado a 180°C por 35 minutos. Una vez horneado: probar con palito en el medio hasta que salga limpio. Dejar templar un poco y luego desmoldar, mientras tanto haremos el merengue. 
3.  Para el merengue: Poner las claras en un cuenco seco y limpio y las varillas también, batir hasta espumar un poco, luego adicionar el azúcar glas, la esencia de vainilla y la cucharada de maicena (me gusta poner un poco). Batir bien hasta tener un merengue consistente y con picos. Con ayuda de una cuchara, disponer el merengue sobre la rosca, espolvorear chispitas de colores, poner el bizcocho sobre un papel de horno y de nuevo llevar al horno a 100°C por 6-7 minutos no dejar que se doré, solo se necesita que se cree la capa externa y luego sí dejar secar entre el horno hasta el día siguiente. 

::: PROCESO FOTOGRÁFICO :::

Ciaramicola / Un regalo de las novias a sus novios en día de Pascua

[Lo preparé la noche anterior] 
1. Mezclar los huevos junto al azúcar hasta que se forme una crema de color amarillo claro, luego agregar mantequilla (en mi caso ghee), ralladura de limón y batir de nuevo.


 

Adicionar el licor (y en caso de poner colorante, hacerlo en este momento), agregar el yogur natural. Tamizar la harina junto al polvo de hornear y la sal, mezclar con espátula en movimientos envolventes. (Me ha quedado una textura más bien gruesa...)

 

2.  Alistar el molde con mantequilla y harina, poner la mezcla adentro y emparejar para que todo esté bien nivelado. Llevar al horno precalentado a 180°C por 35 minutos. Una vez horneado (probar con palito en el medio hasta que salga limpio). Dejar templar un poco y luego desmoldar, mientras tanto haremos el merengue. 

 

3.  Para el merengue: Poner las claras en un cuenco seco y limpio, batir hasta espumar un poco, luego adicionar el azúcar glas, la esencia de vainilla y la cucharada de maicena (me gusta poner un poco). Batir bien hasta tener un merengue consistente y con picos. Con ayuda de una cuchara, disponer el merengue sobre la rosca, espolvorear chispitas de colores, poner el bizcocho sobre un papel de horno y de nuevo llevar al horno a 100°C por 6-7 minutos no dejar que se doré, solo se necesita que se cree la capa externa y luego sí dejar secar entre el horno hasta el día siguiente. 

 

 

NOTA DE HORNO y Tip por si les sucede lo mismo: En casa no tengo horno eléctrico y esta vez tuve una idea que increíblemente por lo menos para esta receta funcionó. Mi horno es a gas, pero tiene dorador, entonces lo que hice fue prender el dorador y una vez bien caliente, poner la rosca sobre el piso del horno y dejar el dorador encendido por 7 minutos. Luego apagar todo y dejar entre el horno hasta que se enfríe bien (lo dejé hasta la mañana siguiente).  Se formó una costra seca perfecta, adentro el merengue estaba cremoso y con un bocado de masa de bizcocho. 


 

otra NOTA...

Se conserva bien a temperatura ambiente, en casa 18°C-20°C. Nos ha durado 4 días. No quería perder la deliciosa textura del merengue al llevarlo a la nevera. 
 


Memorias...


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Sandro Penna 




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Acá pueden ver las ideas de abril  en 1+/-100 desperdicio 0  






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Bonito día

 






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Muchas gracias por pasar por éste rincón,
lleno de poesía de sabores, de sentimiento,
de pensamientos; que para muchos
son recetas conocidas,
para otros descubrimientos completos,
y para otros tantos, recuerdos de la infancia o
remembranzas de algún instante especial
y para mí son todas estas y muchas más...,
entre nuevos retos que día a día me llevan a explorar
dotes que desconocía y que enriquecen mi alma, cuerpo y ser. 


Agradezco cada comentario y estaré atenta a las dudas que se presenten


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6 comentarios:

  1. Querida Nati. No conocía este bizcocho y al hablar de la Pascua, de las tradiciones, de los dulces que os compraban, me has hecho volver muy atrás. Soy una enamorada del merengue desde niña, sin más. En la panadería famosa de mi pueblo, los hacen con café y están ricos, ricos.
    Tu bizcocho pascuero con tu licor casero debe estar delicioso.
    Gracias por traerlo a 1 +/- 100 y un beso enorme.

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  2. Hola Natalia!. Me encantan los dulces con merengue, así que este ha de estar delicioso.
    Un abrazo.

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  3. Que bonito y delicioso te quedo el bizcocho, hoy aprendo mucho contigo leyendo sobre la ciaramicola. La textura del bizcocho me recuerda tambien a lo que en Mexico llamamos Panque, aunque por lo general se hace en molde de pan, no de rosca. La adicion del licor de fresas es todo un acierto y debe darle un toque especial al pan, voy a tener que ver como lo hiciste, que ya casi esta aqui la temporada de las fresas y me lo has antojado tremendamente. El merengue se ve precioso con esas grajeas de colores, que lindo ha de ser recibir un regalo asi de las novias!
    Besos

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  4. Mi querida Natalia, ayer estuve aquí leyéndote y tuve que irme sin poder comentar, y es que afloraron en mi mente recuerdos de cuando era niña, y mi madre nos daba unas pesetas para comprar un "Coqui", no pude resistirlo y mi corazón que sabes que en estos días está totalmente destrozado, a lo más mínimo me derrumbo, y me harté de llorar.
    El Coqui o los Coquis, eran unos cucuruchos pequeñitos de barquillo de canela, relleno de suave merengue blanco, rosa o celeste, espolvoreado con bolitas de anís de colores, como las que has utilizado en tu Ciaramicola, y que un señor los vendía por las calles, siempre a la hora de la merienda, llevaba una bandeja de madera con agujeros dónde insertados los cucuruchos, dejaban fascinados a los niños por su impresionante colorido y riquísimo sabor. Iba pregonando, a viva voz, "¡Coquiiis..., al rico Coquiiii!, recién hechos, de fresa o de piña, para el niño, o la niña" Aunque en realidad de piña nunca los vi, todos tenían el mismo sabor a merengue con bolitas de anís pero claro, evidentemente mis favoritos era los rositas, que de fresa, lo único que llevaba era el color, jajaja... Pero evidentemente, mi madre no siempre nos daba esas tres pesetas para comprar uno diciéndonos con cara de asco: "¡uahg, Coqui-penicilina" Jajajaja... Pero claro, cuanto más nos lo decía, más lo disfrutábamos los día que teníamos la suerte de comernos uno.
    Hoy hubiera disfrutado un buen trozo de tu pastel, que a pesar de ser denso y contundente como nos cuentas, para mí sería como regresar a esa infancia que tuve super feliz.
    Besos mi preciosa Nati, me encanta que me hagas disfrutar con recuerdos que se asemejan a los míos sobre todo porque se nota lo feliz que te hacen revivirlos.

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  5. Hola Natalia!! Ya te digo que para mí nunca es demasiado merengue, ja, ja. Sólo con leerte y oírte decir "esa nube de azúcar" ya se me hace la boca agua. Oh, sí quiero hundirme en esa nube de azúcar, me encanta ese merengue tan empalagoso del que hablas, ja, ja.
    Hoy me haces otro gran descubrimiento en esto de la reposteria italiana, este bizcocho denso, rico, coronado de un impoluto merengue con confetis de colores ha sido un descubrimiento maravilloso.
    Y quiero agradecerte que me hayáis otorgado el tercer premio del concurso de Marisa, os lo agradezco muchísimo, con el montón de recetas tan buenas que había y he sido una de las afortunadas. Gracias de corazón, sé que la tarea no era fácil y era una gran responsabilidad. Enhorabuena por lo objetivas que habéis sido y gracias. Besitos.

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  6. Hola, me ha encantado el pastel y su historia. El merengue es mi perdición y no te digo de mi marido. Sería un buen regalo de mi parte para él. disfrutaría lo más de él. Un beso enorme, querida amiga!!

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