PASTELES DE LECHE, adaptación recetario barroco, celebrando a las madres • [COCINARTE]

“I think that if you shake the tree, you ought to be around when the fruit falls to pick it up.”

Mary Cassatt

________________

*

 

Cuando pienso en madres, una de las reminiscencias que llegan a mi mente es el gusto que siempre tuve por la leche, que ahora que están llegando noches frías, un vasito de leche caliente para antes de dormir es lo que me pide mi cuerpo, me gusta también la leche en polvo: volverla papilla con un poquitín de agua tibia y ñammm..., que le vamos a hacer, soy de temporadas, de épocas: té, agua de panela, aromática de frutas y hierbas, agua o quizás un café (para la migraña). Siempre me encantó tomar leche, eso sí, fui de leche de tarro, pero era feliz y Mr.G. igual.  

Hoy estos pasteles han caído especiales para conmemorar el día de madres que en mi país han pasado de fecha para último domingo de mes por causa del bicho...; sin embargo el motivo siempre se conmemora, hoy, mañana, o cualquier día, esta entrada la escribo pensando en ti mamá, que estás allí a unos 7.500km de distancia en línea recta..., y en la esperanza por volver a verte a ti y a toda la familia, por poder de nuevo abrazarte, decirte que te amo con todo mi corazón junto a mi padre y mi Luli, ...abrazarlos, estrujarlos y llenarlos de mimos y así con los abuelos y el resto del combo. Hoy la entrada es dulce, con aroma a leche cuajada, esa que me recuerda el mielmesabe, que de pequeña disfrutaba feliz cuando mi madre lo preparaba cortando la leche y esta pequeñita quedaba asombrada con ese proceso casi mágico del resultado final con su lindo color y textura. (un día lo traeré).  

 

Día 9 y ha caído este segundo domingo de mayo, (día de la madre en Brasil también), y la cita es con el reto CocinArte. Donde María desde su delicioso espacio In my little Kitchen, nos invita cada mes a descubrir un cuadro o espacio arquitectónico, escultura analizando algún pintor, estilo, época... una ventana que nos lleva a crear deliciosas recetas.    

 

En este día nuestra artista es la estadounidense Mary Cassatt (1.844 -1.926), su familia nunca la respaldó en su idea de ser artista, sin embargo ella siempre lo tuvo claro. Vivió gran parte de su vida en Paris, hizo parte del movimiento impresionista y compartió junto a otra mujer fundadora del movimiento Berthe Morisot que ya hemos analizado aquí y que para aquella vez una Tarte Tropézienne cayó especial. De todo lo que leí de esta mujer, me gusta mucho la evolución que tuvo, que hasta el estilo japonés lo apropio en una etapa de su vida. Siempre es un placer contemplar las diversas escenas de madres e hijos, se dice que también era la pintora de los espejos, ya que en muchos cuadros aparecen y esto la hace especial en el juego de perspectivas y manejo de profundidad. 

 

Hoy la obra se llama Madre e hijo, la verdad es que son muchas las obras en las que madres e hijos protagonizan los cuadros de M.C.  Voy al grano..., porque no sé si ella llego a ser madre, creo que no; lo que veo es que en la serie de obras que es extensa de madres e hijos, me conmueve el sentimiento que plasma en sus cuadros, el candor, ternura, delicadeza, mimo, detalles, gestos, atmósferas cálidas del actuar de la madre con sus pequeños en esa primera etapa de la vida. Esa intimidad de una parte del universo femenino, en una de tantas facetas que puede tener una mujer y que para el caso hablamos de la maternidad. 

 Sus obras me seducen, me hacen sentir ese amor que una madre siente por su pequeño, ese sentimiento que creo tenemos todas las mujeres hacía los pequeños y que unas llegan a sentirlo directamente de sus entrañas, otras se vuelven madres con la vida, dando amor a pequeños que lo necesitan, ...otras por elección o no..., pues no lo son. Hoy me enfoco en el sentimiento materno tan especial que Mary Cassatt logra capturar de manera magistral. 

 

Mi propuesta inicialmente la quería hacer con algún alimento que me recordara esa etapa de mi infancia y aquí tengo que hablar de mi abuela con quien me crie y con quien tengo una conexión más que especial, una papilla de frutas, frijoles machacados en su caldo, compota de galletas María, con banana y zumo de naranja, cremas de verduras y pollo, avena en leche endulzada con panela que preparaba todas las mañanas bien de madrugada mi abuelo,  ...y tantas otras delicias que me recuerdan ese sentimiento de proximidad y conexión que creamos desde la infancia con nuestros abuelos, con nuestros padres, con mamá, con papá. Luego de analizar el cuadro, veo que siempre las madres se acercan lo más que pueden a sus pequeños, será el aroma de sus pequeñas cabecitas que como si fuera un delicado queso, irradian ese aroma especial de ellas y que según leí en algún lado, allí hay un rasgo distintivo de aroma en cada recién nacido con su madre, como una huella dactilar de aroma que por siempre queda sellada.  

 

La semana pasada compré dos litros de leche entera que reduje hasta 600gr., obtuve una maravillosa leche evaporada que es uno de los ingredientes protagonistas de estos pasteles de leche que me recuerdan esa textura sutil, esponjosa, delicada y especial que provoca darle un apapacho y beso a un pequeñín, esa ternura y delicada textura que evocan estos pasteles que me enamoraron y que encontré junto a estos Buñuelos de Queso fresco (y allí, pueden ver de lo que hablo, hoy estoy en modo: día de madres ;)) 

La receta es sencilla, eso sí es una adaptación de los Pasteles de queso del recetario de Francisco Martínez Montiño y que mi querida Hirma de Sopa y Pilla también los preparó maravillosos.  (Todo lo que lleve leche o queso me atrae y ésta receta, me hizo evocar un poco esa escena del cuadro que hoy nos inspira CocinArte). He puesto 8 huevos en total que van en diferentes tiempos, azúcar, harina, punto de sal y la leche, lleva dos tipos de cocciones, primero una crema, luego adición de huevos y al horno a que crezcan y doren. 

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Tiempos}

Preparación crema: 25 minutos | Cocción crema: 8 minutos | Adición huevos y pasado moldes: 10 minutos  | Horneado final: 25 minutos + 10 minutos dorador

________________________________________________________________________________________________________

Ingredientes:

PASTELES DE LECHE

Rinde 10/12 porciones [depende del recipiente a utilizar]

[UNA ADAPTACIÓN DE UN RECETARIO MEDIEVAL AL FINAL LA RECETA]

- 8 huevos

- 250 gr azúcar*

- 1/3 cucharadita sal

- 45 gr harina

- 600 ml leche**

+ manteca de cerdo (para untar los moldes)

+ moldes de tartaletas o de petit gâteau

*Para la próxima le pondré 200 gr. creo que quedó un poquitín subido de dulce para lo que estoy acostumbrada; eso sí, muy buenos.  

**Tenía leche que evaporé de 2 litros, obtuve 600 ml y eso fue lo que puse para esta receta, bien podrían utilizar leche entera. 

________________________________________________________________________________________________________

«PREPARACIÓN»

PASTELES DE LECHE

1. Batir 5 huevos hasta espumar, luego adicionar el azúcar y batir bien hasta tener una crema de color amarillo claro. 

2. Adicionar la sal y la harina y mezclar con una espátula de goma hasta que todo este bien integrado. 

3. Verter la leche y remover de nuevo. 

4. Poner la mezcla en un cazo y llevar al fuego, remover bien y una vez toma calor, con ayuda de unas varillas grandes batir continuamente sin dejar formar grumos, dejar cocinar por unos 4 minutos hasta tener una crema espesa. (Reservar) 

5. Encender el horno a 180°C   

6. Mientras tanto, untar los moldes con manteca de cerdo (los pase también con un poco de harina, sin embargo tienden a pegarse). 

7. De nuevo, vamos a la crema, adicionar con el fuego apagado los 3 huevos restantes y batir enérgicamente con ayuda de un mezclador de varillas grandes. 

8. Llenar cada molde con una parte de la mezcla, ayudarnos de una cuchara (cada uno contiene 100gr. moldes altos y 65 gr. de los moldes de tartaletas). 

9.  Hornear por 25 minutos a 170°C (mi horno es a gas), luego puse el dorador 8 minutos más para que terminen de crecer por encima y de dorar. 

10. Crecen bastante y luego al sacarlos del horno se desinflan. Servir tibios o fríos están muy buenos. 

:::::[PASO A PASO FOTOGRÁFICO]:::::

PASTELES DE LECHE

1. Batir 5 huevos hasta espumar, luego adicionar el azúcar y batir bien hasta tener una crema de color amarillo claro. 

 

2. Adicionar la sal y la harina y mezclar con una espátula de goma hasta que todo este bien integrado.  Verter la leche (puse leche que evaporé de 2 litros obtuve 600ml).  y remover de nuevo. 

 

3. Poner la mezcla en un cazo y llevar al fuego, remover bien y una vez toma calor, con ayuda de unas varillas grandes batir continuamente sin dejar formar grumos, dejar cocinar por unos 4 minutos hasta tener una crema espesa. (Reservar) 

 

4. Encender el horno a 180°C   

5. Mientras tanto, untar los moldes con manteca de cerdo (los pase también con un poco de harina, sin embargo tienden a pegarse). 

6. De nuevo, vamos a la crema, adicionar con el fuego apagado los 3 huevos restantes y batir enérgicamente con ayuda de un mezclador de varillas grandes. 

 

7. Llenar cada molde con una parte de la mezcla, ayudarnos de una cuchara (cada uno contiene 100gr. moldes altos y 65 gr. de los moldes de tartaletas). 

8.  Hornear por 25 minutos a 170°C (mi horno es a gas), luego puse el dorador 8 minutos más para que terminen de crecer por encima y de dorar. 

9. Crecen bastante y luego al sacarlos del horno se desinflan. Servir tibios o fríos están muy buenos. 

Dejar templar y desmoldar con cuidado, son bien tiernos

 

Parecen besos de ángeles, eso sí de acuerdo a la receta de Montiño y aquí ya me voy a la sugerencia, donde debían quedar lo más altos posible, creo que para la próxima hay que aumentar la cantidad de harina, para que no se desinflen, según su sugerencia, agregando además almendra en laminas.   

 

NOTAS

• He utilizado leche que evaporé, bien se podrá utilizar leche entera. 

• Se pueden consumir tibios o fríos, quedan tiernos, húmedos, esponjosos y con un rico perfume de leche cuajada 

• No he puesto ningún aroma, solo quise disfrutar del contraste de la leche evaporada que hice, junto a los huevos batidos y el azúcar, la casa olía a Almojábanas colombianas (un día las haré también)... 

• El sabor de estos pasteles y su aroma es celestial, me recuerda mucho la textura y un poco el sabor de la Quesada Pasiega que tengo en el blog. 

 

Buen inicio de semana y feliz día a todas las madres 

 

#poesiaculinaria

*

Acá pueden ir al compilado de recetas de Mary Cassatt  

#retococinArte

*

***

*

***

*

Receta adaptada de acá 

*****

Muchas gracias por pasar por éste rincón,

lleno de poesía de sabores, de sentimiento,

de pensamientos; que para muchos

son recetas conocidas,

para otros descubrimientos completos,

y para otros tantos, recuerdos de la infancia o

remembranzas de algún instante especial

y para mí son todas estas y muchas más...,

entre nuevos retos que día a día me llevan a explorar

dotes que desconocía y que enriquecen mi alma, cuerpo y ser. 

Agradezco cada comentario y estaré atenta a las dudas que se presenten

···

_____________________________________________

Me encuentran en: 

Instagram   / Facebook  / Twitter  / Pinterest 

#poesiaculinaria   ·         @poesiaculinaria 

___________________________

  [❤︎]