Ensalada de Navidad en casa de mamá

“No dia de seu nascimento,                    
você chorou e o mundo se alegrou.                    
Viva a sua vida de modo que,                    
no dia de sua morte                    
o mundo chore e você se alegre.                    

”                    

CHEROKEE                    

Último día del mes de noviembre y prácticamente ya estoy empacando maletas, clausurando cocina brasileña, depurando cosas que ya no sirven o son viejitas, limpiando la casa, trepándonos por las paredes junto a Mr.G (mi media costilla) para que todo quede lindo y esté "pulcro" en el regreso. Ya el viaje nos pisa los talones, la nevera... desocupándola lentamente y aunque no era consciente de ello en días anteriores con todo el corre-corre intenso que tuve, (sí... ya lo sé... más intenso de lo normal) lo digo porque adelanté muchas recetas de diciembre en este mes. 

Ya el ánimo y alegría por el reencuentro con tus seres queridos se incrementa, el corazón comienza a latir más fuerte, el regocijo es inmenso, la suave brisa cálida del verano brasileño se balancea feliz y contundente en casa, pero el viento frío de la Sabana de Bogotá me llama, cierro los ojos e invoco feliz la humedad de la noche, la lluvia y los días de sol y cielo despejado que también suelen darse por esta época del año en mi ciudad natal. El aire de navidad comienza a sentirse con más fuerza, los sonidos, aromas, luces... ya se sienten cerca. Mi tierra natal me llama cual imán buscando su polo opuesto.  

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Aunque la emoción invade mi ser, no puedo evitar recordar la tragedia sucedida con el equipo de futbol Chapecoense ocurrida hace poco. Hoy estarían cumpliendo un sueño dentro de su carrera en ascenso disputando una final de copa Sudamericana... pero voy más allá porque la verdad tanto aquí en Brasil como en Colombia y en muchos lugares la consternación es total ante lo ocurrido. Los sueños y las vidas de tantos jóvenes y por supuesto de las demás personas que los acompañaban ya no están, en cuestión de segundos se perdieron. Y la primera reacción es inevitable, el pensar en el por qué de las cosas y lo ocurrido. Los que se salvaron y no subieron al avión, el clima de esa noche, una falla de la aeronave..., en fin... tantas hipótesis. Es triste decirlo pero con tragedias como esta y tantas otras que a diario ocurren en el mundo te estremecen a tal nivel, que vuelve tu polo a tierra de nuevo y piensas en lo que realmente importa, porque te das cuenta que la vida es un soplo, que hoy estamos y mañana no sabemos. Solo quiero decir que a veces nos encasillamos en cosas tan banales que perdemos el camino y la esencia; dejamos de valorar y agradecer, dejamos de vivir intensamente. Solo quería expresar un poco ese sentimiento y compartirlo. Ayer fue un día triste, hasta el cielo lloró.

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Regresando de nuevo con esta receta de hoy, la verdad no sabía como titularla... porque esta es la ensalada de Navidad que preparamos religiosamente en casa de mi madre cada Navidad y Año Nuevo. Mis padres tienen la tradición de hacer la cena para la familia (y casi todas las comidas a decir verdad) y esta es la ensalada que todos adoran. Es una sencilla ensalada de frutas que suelen acompañar con pernil de cerdo o con pavo al horno; todo "hecho en casa". Quise compartirla y transmitir su secreto que es la salsa que la acompaña. Aprovecho para finalizar noviembre y comenzar diciembre compartiendo un pedacito de la Navidad de mi casa y la cual será el acompañante de un plato especial que compartiré pronto. 

Ahora si voy con la receta; cabe aclarar que hice una versión más sofisticada al presentarla de esta manera para mostrar todos los ingredientes y jugar con una composición alegre. Pero sencillamente se mezcla todo y se pone la cantidad de salsa a gusto de cada comensal con un rico jamón o el acompañante de su preferencia.  ^_^

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Tiempos}

Tiempo Total: 40 minutos 

Preparación de la salsa: 10 minutos 

Preparación de la fruta: 30 minutos

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Ingredientes:

Ensalada navideña de mis padres

[ No pongo cantidades con la ensalada porque depende del gusto de cada uno ]

[Para la salsa de hierbabuena y estragón]

- hojas de un manojo grande de hierbabuena o menta

- 90 gr de leche condensada
- 300 gr de crema de leche
- 1 cucharada de mostaza Dijon
- 1 cucharada de estragón 

- zumo de 1/2 limón

- 1 pizca de sal

- 1 pizca de nuez moscada

- pimienta al gusto

[Para la ensalada]

- Fresas
- Mango (no muy maduro ni muy "biche"*, termino que se corte pero que no se deshaga al hacer cubitos)
- Manzana verde
- Uvas sin semillas
- Uchuvas** (opcional)

*biche. 1. adj. Col. Dicho especialmente de un fruto : Que no ha logrado su plenitud o culminación.

**Golden Berries o aguaymanto / uchuva / ushun (Physalis peruviana)

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«PREPARACIÓN»

Para la salsa

Poner en la licuadora la la crema de leche, la leche condensada, el zumo de limón, la cucharada de mostaza Dijon, el estragón, la nuez moscada, la pimienta y la sal y licuar todo. Adicionar las hojas de hierbabuena y licuar o procesar de nuevo. Llevar al refrigerador sellado para que tome consistencia hasta el momento de servir. 

Para la ensalada

Lavar muy bien y escurrir toda la fruta. Cortar las fresas a la mitad, pelar el mango y cortar en bastones de 1 cm de espesor, pelar las manzanas y cortarlas en cubos o rectángulos ponerlas entre el mango y mezclar para evitar que se oxiden (ese truco funciona de maravilla, para evitar ponerla en agua con limón). Las uvas partirlas por la mitad y quitar las semillas (si tienen) y las uchuvas partirlas a la mitad. Poner todas las frutas en un bol de vidrio grande y mezclar. (Refrigerar hasta el momento de servir). Adicionar la salsa en cada porción (garantizando que todos tengan salsa porque tiende a desaparecer de lo rica que queda). 

Esta ensalada se puede acompañar de una rica carne al horno, con un delicioso puré de papas o incluso la veo de postre refrescante para grandes y chicos.  Y a disfrutar!!!

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"A vida é um sopro.”

Oscar Niemeyer

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Feliz día

Muchas gracias por pasar por éste rincón,

lleno de poesía de sabores, de sentimiento,

de pensamientos; que para muchos

son recetas conocidas,

para otros descubrimientos completos,

y para otros tantos, recuerdos de la infancia ó

remembranzas de algún instante especial

y para mí son todas estás y muchas más..,

entre nuevos retos que día a día me llevan a explorar

dotes que desconocía y que enriquecen mi alma, 

cuerpo y ser. 

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Agradezco cada comentario y 

estaré atenta a las inquietudes que se presenten.

nati

[❤︎]